En primero de mayo de 1886 trabajadores de
Chicago en Estados Unidos, decidieron lanzarse a la huelga para exigir salario
justo, jornada de 8 horas y libertad de expresión y asociación. En el intento de
la policía por disolver las manifestaciones, el punto álgido, fue la muerte de
muchos de ellos. Tres de sus líderes fueron condenados a prisión y cinco a la
horca.
En memoria de su inmolación, el Congreso
Obrero Socialista de la Segunda Internacional, celebrado en París en 1889,
declaró al primero de mayo como el “día internacional del trabajo”.
En México, la “Casa del Obrero Mundial”
organizó en 1913 el primer desfile obrero. En 1923 el Presidente Álvaro
Obregón, acordó celebrar en esta fecha como el día de la lucha obrera mexicana
y a partir de 1925 el presidente Plutarco Elías Calles, decide conmemorarla con
un desfile obrero.
Hoy, para todos los sectores sociales y
productivos, son fechas propicias para reflexionar y buscar alternativas de
solución a la crítica situación económica generadas por la desigualdad social
que vive el país; escenarios difíciles y complejos en donde las características
dominantes, son el progresivo deterioro de las condiciones y calidad de vida,
el bajo poder adquisitivo de los salarios, la falta de oportunidades, el
desempleo y subempleo, la hiriente marginación y la creciente pobreza extrema
que fracturan la cohesión nacional y el bienestar de millones de campesinos y
trabajadores.
Con altura de miras, por México y para México,
hagamos nuestro mejor esfuerzo para alcanzar mayor productividad y con ello
mejores empleos. Todos generemos el cambio cambiando actitudes y aptitudes.
Que tengan buen día.
Miguel Chávez Michel
En la opinión de…
Ángel Guardián
Miércoles Iro de mayo
de 2012
XERL (Grupo
Radiolevy)
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